
Por Alfredo Corton
La llamaremos Ana.
Ana le dice a su pareja que no puede dormir bien.
Más aún. Ana ha estado hablando de ésto en varias ocasiones y nuestra escena se desarrolla en una tranquila -aparentemente- tarde de verano con Ana, su esposo Raúl y unos cuatro amigos más.
Ana se queja y dice que no duerme bien desde hace semanas sin causa aparente.
Raúl le sugiere que intente dormir una siesta para recuperarse.
Ana le contesta: Sí, pero si duermo a la tarde no voy a poder dormir a la noche.
Laura, una amiga en común le sugiere que tome un té de tilo, ya que a ella le dá un buen resultado. Ana le agradece y le dice: Sí, pero si comienzo a tomar infusiones nunca podré dormir naturalmente.
Jorge, el esposo de Laura, ya un poco molesto, le sugiere a Ana que visite a un terapeuta especializado en esos problemas ya que pueden encontrar juntos por qué no puede dormir bien.
Casi imperturbable Ana responde: Si, Jorge, pero en principio no "creo" en los terapeutas y además alguno me puede derivar a otro profesional que me dé pastillas para dormir y no quiero.
Se hace un profundo silencio en el grupo y todos sienten un intenso malestar.
¿Qué ha pasado?
Ana, sin saberlo, está manipulando a los demás con un "doble mensaje" que constituye un "Juego Psicológico" que el Dr. Eric Berne llamó exactamente "Sí, pero....."
Los juegos psicológicos
En 1964, el psiquiatra canadiense Eric Berne, creador de la teoría del "Análisis Transaccional" publica un libro sorprendente llamado "Games people Play", conocido en nuestro medio como "Los juegos en los que participamos".
En este libro, Berne tipifica el "juego" que Ana está realizando con sus "víctimas" y lo llama "SI, PERO..."
Eric Berne, explica los juegos psicológicos como una forma disfuncional de buscar cubrir nuestras necesidades de atención, reconocimiento y afecto, aunque sea de una forma negativa.
La palabra “juego” no indica diversión, sino una dinámica dentro de las relaciones interpersonales. Se diferencian de los juegos de azar en que en los juegos psicológicos siempre se sale perdiendo (tienen un costo emocional).
Los juegos psicológicos tienen un carácter inconsciente, pues las personas no se dan cuenta de su mecanismo cuando se relacionan socialmente. De lo que sí pueden darse cuenta es de que frecuentemente caen en situaciones similares en las que terminan sintiéndose mal, pero no son conscientes de cuánto colaboran ellos en la repetición de estas situaciones.
Para entender los juegos psicológicos hay que conocer que la comunicación que se dá en ellos tiene dos niveles, uno superficial y aparentemente aceptable (el pedido de ayuda de Ana) y uno "ulterior" o doble mensaje que en el caso de Ana es la descalificación sucesiva de cada una de las sugerencias de su pareja y amigos
Eric Berne divide las comunicaciones para entender este proceso entre lo que él llama "Estados del Yo", que son el PADRE, el ADULTO y el NIÑO.
Ana juega el papel de víctima para pasar a "victimaria" o "perseguidora" y así afirmar su "posición existencial" que básicamente refuerza su mensaje interno de "nadie me puede ayudar"
Los juegos psicológicos son muy variados y existen categorías de ellos, hay juegos de poder, sexuales, de pareja,… y tienen una doble finalidad:
a) Manipular a los demás, en lugar de establecer con ellos una relación sana y directa.
b) Demostrarse a sí mismo y a los otros que los “mitos” (lo que se cree o se piensa de sí mismo) que le dominan son ciertos.
Los juegos se aprenden a una edad temprana, quedan grabados y se repiten después sistemáticamente, involucrándose la persona en una serie de jugadas, movimientos o acciones que tienen un resultado previsto.
La mayoría de los juegos son socialmente tolerables, aunque hay otros juegos más graves que pueden perjudicar la salud e incluso la vida de la persona como, por ejemplo, las adicciones. De hecho Berne califica a la "guerra" como un terrible juego psicológico en este caso de tercer grado (Los peores, con consecuencias de muerte o locura).
Los juegos psicológicos pueden bloquear o minar nuestras oportunidades de tener éxito en diversas áreas de nuestra vida, ya que consumen y disminuyen nuestra energía psíquica, dejándonos nerviosos, frustrados, tristes, rabiosos, con un falso rebusque de triunfo o superioridad.
La fórmula de los juegos
En los juegos psicológicos existe una sistemática que siempre se cumple. La fórmula comienza en el Cebo, que es la jugada o acción que efectúa el primer jugador. Se produce una reacción si la otra persona ”pica”.
Se podría representar de la siguiente manera:
Cebo + Flaqueza = Respuesta – Cambio – Beneficio Final.
Berne introduce el concepto de "Stroke", que en inglés puede significar "toque" y en castellano lo traducen como "caricias" que no es más ni menos que el reconocimiento de un ser vivo a otro. Nuestra necesidad de reconocimiento y "caricias" hace que generemos situaciones donde recibimos caricias negativas. "Es mucho mejor que nada"
¿Cómo detectar los juegos psicológicos?
Existen terapeutas que se han especializado en nuevas ciencias de la conducta.
En Argentina, el Dr. Roberto Kertész ha sido un pionero en la materia y la Universidad de Flores de la cual él es Rector es un centro de formación idóneo en los nuevos enfoques terapéuticos.
¿Podemos nostros detectar cuándo estamos frente a una situación de "juego psicológico?
Indudablemente es más fácil descubrir los juegos que están jugando los demás, sin embargo hay preguntas que pueden ayudarte a detectarlos:
¿Qué hacer para romper los juegos psicológicos?
La llamaremos Ana.
Ana le dice a su pareja que no puede dormir bien.
Más aún. Ana ha estado hablando de ésto en varias ocasiones y nuestra escena se desarrolla en una tranquila -aparentemente- tarde de verano con Ana, su esposo Raúl y unos cuatro amigos más.
Ana se queja y dice que no duerme bien desde hace semanas sin causa aparente.
Raúl le sugiere que intente dormir una siesta para recuperarse.
Ana le contesta: Sí, pero si duermo a la tarde no voy a poder dormir a la noche.
Laura, una amiga en común le sugiere que tome un té de tilo, ya que a ella le dá un buen resultado. Ana le agradece y le dice: Sí, pero si comienzo a tomar infusiones nunca podré dormir naturalmente.
Jorge, el esposo de Laura, ya un poco molesto, le sugiere a Ana que visite a un terapeuta especializado en esos problemas ya que pueden encontrar juntos por qué no puede dormir bien.
Casi imperturbable Ana responde: Si, Jorge, pero en principio no "creo" en los terapeutas y además alguno me puede derivar a otro profesional que me dé pastillas para dormir y no quiero.
Se hace un profundo silencio en el grupo y todos sienten un intenso malestar.
¿Qué ha pasado?
Ana, sin saberlo, está manipulando a los demás con un "doble mensaje" que constituye un "Juego Psicológico" que el Dr. Eric Berne llamó exactamente "Sí, pero....."
Los juegos psicológicos
En 1964, el psiquiatra canadiense Eric Berne, creador de la teoría del "Análisis Transaccional" publica un libro sorprendente llamado "Games people Play", conocido en nuestro medio como "Los juegos en los que participamos".
En este libro, Berne tipifica el "juego" que Ana está realizando con sus "víctimas" y lo llama "SI, PERO..."
Eric Berne, explica los juegos psicológicos como una forma disfuncional de buscar cubrir nuestras necesidades de atención, reconocimiento y afecto, aunque sea de una forma negativa.
La palabra “juego” no indica diversión, sino una dinámica dentro de las relaciones interpersonales. Se diferencian de los juegos de azar en que en los juegos psicológicos siempre se sale perdiendo (tienen un costo emocional).
Los juegos psicológicos tienen un carácter inconsciente, pues las personas no se dan cuenta de su mecanismo cuando se relacionan socialmente. De lo que sí pueden darse cuenta es de que frecuentemente caen en situaciones similares en las que terminan sintiéndose mal, pero no son conscientes de cuánto colaboran ellos en la repetición de estas situaciones.
Para entender los juegos psicológicos hay que conocer que la comunicación que se dá en ellos tiene dos niveles, uno superficial y aparentemente aceptable (el pedido de ayuda de Ana) y uno "ulterior" o doble mensaje que en el caso de Ana es la descalificación sucesiva de cada una de las sugerencias de su pareja y amigos
Eric Berne divide las comunicaciones para entender este proceso entre lo que él llama "Estados del Yo", que son el PADRE, el ADULTO y el NIÑO.
Ana juega el papel de víctima para pasar a "victimaria" o "perseguidora" y así afirmar su "posición existencial" que básicamente refuerza su mensaje interno de "nadie me puede ayudar"
Los juegos psicológicos son muy variados y existen categorías de ellos, hay juegos de poder, sexuales, de pareja,… y tienen una doble finalidad:
a) Manipular a los demás, en lugar de establecer con ellos una relación sana y directa.
b) Demostrarse a sí mismo y a los otros que los “mitos” (lo que se cree o se piensa de sí mismo) que le dominan son ciertos.
Los juegos se aprenden a una edad temprana, quedan grabados y se repiten después sistemáticamente, involucrándose la persona en una serie de jugadas, movimientos o acciones que tienen un resultado previsto.
La mayoría de los juegos son socialmente tolerables, aunque hay otros juegos más graves que pueden perjudicar la salud e incluso la vida de la persona como, por ejemplo, las adicciones. De hecho Berne califica a la "guerra" como un terrible juego psicológico en este caso de tercer grado (Los peores, con consecuencias de muerte o locura).
Los juegos psicológicos pueden bloquear o minar nuestras oportunidades de tener éxito en diversas áreas de nuestra vida, ya que consumen y disminuyen nuestra energía psíquica, dejándonos nerviosos, frustrados, tristes, rabiosos, con un falso rebusque de triunfo o superioridad.
La fórmula de los juegos
En los juegos psicológicos existe una sistemática que siempre se cumple. La fórmula comienza en el Cebo, que es la jugada o acción que efectúa el primer jugador. Se produce una reacción si la otra persona ”pica”.
Se podría representar de la siguiente manera:
Cebo + Flaqueza = Respuesta – Cambio – Beneficio Final.
- Cebo: Está dirigido a “enganchar” la parte complementaria sensible de la otra persona.
- Flaqueza: Es el punto débil del interlocutor que se “engancha” en el cebo.
- Respuesta: El interlocutor responde al juego (por su flaqueza), en un estado NO OK.
- Cambio: El primer jugador cambia bruscamente de rol. El segundo se siente confundido y sorprendido.
- Beneficio: Ambos participantes se sienten mal. El primer jugador “gana”, confirma su mito y su posición existencial.
Berne introduce el concepto de "Stroke", que en inglés puede significar "toque" y en castellano lo traducen como "caricias" que no es más ni menos que el reconocimiento de un ser vivo a otro. Nuestra necesidad de reconocimiento y "caricias" hace que generemos situaciones donde recibimos caricias negativas. "Es mucho mejor que nada"
¿Cómo detectar los juegos psicológicos?
Existen terapeutas que se han especializado en nuevas ciencias de la conducta.
En Argentina, el Dr. Roberto Kertész ha sido un pionero en la materia y la Universidad de Flores de la cual él es Rector es un centro de formación idóneo en los nuevos enfoques terapéuticos.
¿Podemos nostros detectar cuándo estamos frente a una situación de "juego psicológico?
Indudablemente es más fácil descubrir los juegos que están jugando los demás, sin embargo hay preguntas que pueden ayudarte a detectarlos:
- ¿Qué es lo que está ocurriendo una y otra vez?
- ¿Cómo empieza?
- ¿Qué sucede luego?
- ¿Y después qué pasa?
- ¿Cómo termina?
- ¿Cómo te sientes después que ha terminado?
¿Qué hacer para romper los juegos psicológicos?
- Conocer la dinámica de los juegos psicológicos: De esta manera podemos hacernos conscientes de este mecanismo, para poder prevenirlo o detenerlo.
- Pregúntate qué estás ganando jugando a ese juego. Te ayudará responder a esto mirando cuáles son tus carencias o necesidades más importantes.
- Ignorar el juego: Cambiar de tema, retirarse de la escena,…
- Ofrecer alternativas: Cambiar a un juego para “hacer algo en su lugar”. Si la persona aprende lo que debe hacer para cubrir sus necesidades, los juegos desaparecerán.
- Invitar a los participantes a hacer intercambios auténticos y evitar los dobles mensajes.
Textos consultados: "Análisis Transaccional Integrado" Dr. Roberto Kertész. Editorial IPPEM